La Santa Sede aseguro que las palabras del papa Francisco sobre el riesgo de «mexicanización» de Argentina no tenían «una intención estigmatizante hacia el pueblo de México» y reconoció el esfuerzo que está realizando el Gobierno del país en la lucha contra el narcotráfico.
«La Santa Sede considera que el término ‘mexicanización’ de ninguna manera tendría una intención estigmatizante hacia el pueblo de México y, menos aún, podría considerarse una opinión política en detrimento de una nación que viene realizando un esfuerzo serio por erradicar la violencia y las causas sociales que la originan».
Así lo confirmó la Embajada de México ante la Santa Sede en un comunicado remitido a los medios, después de que la Secretaría de Estado vaticana se pusiera en contacto con el embajador de México ante la Santa Sede, Mariano Palacios Alcocer.
En la misiva, según la Embajada mexicana, «la Santa Sede reconoció el excelente momento por el que atraviesan las relaciones con México» y afirmó que Jorge Bergoglio «en ningún momento, ha pretendido herir los sentimientos del pueblo mexicano ni los esfuerzos del gobierno del país».
En la nota de prensa enviada a los medios, el país latinoamericano subrayó que «la Santa Sede reconoció que los programas implementados por el Gobierno de México para la preservación de la paz y la tranquilidad sociales conllevan a enfrentar las causas que la originan».
Además, aseguró que «la Santa Sede considera que la gravedad del fenómeno del narcotráfico en Latinoamérica ha obligado a que los gobiernos, como es el caso de México, establezcan programas para combatir la violencia, devolver la paz y la tranquilidad a las familias, incidiendo sobre las causas sociales que la originan».
Con la respuesta de la Santa Sede, México da por finalizada la polémica en torno a este asunto «por vía diplomática».
«Estamos satisfechos por la respuesta pronta de la Santa Sede y por el contenido de la nota», afirmó el embajador de México ante la Santa Sede, Mariano Palacios Alcocer.