Este día, el presidente del Sindicato de Trabajadores del Hospital General San Felipe, Elvin Canales, se pronunció sobre las operaciones del hospital móvil de Tegucigalpa y señaló que se trata de una estafa y de un fracaso.
Por lo que arguyó que como trabajadores de la salud saben identificar el equipo necesario para la puesta en marcha de un nosocomio de esa categoría, pero esa estructura modular no cumple los requerimientos y muestra muchas falencias.
“Ese hospital móvil es un fracaso y una estafa para los hondureños”, apostilló el dirigente sindical.
Asimismo, refirió que hasta el momento han querido “tapar el sol con un dedo” al trasladar a algunos pacientes.
También recordó que uno de los dos primeros pacientes trasladado a este centro modular murió 24 horas después de haber sido ingresado, lo que revela que no se cuenta ni con el personal ni equipo necesario para atender pacientes con Covid-19.
En ese sentido, señaló que los únicos responsables son los miembros de la junta interventora de Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), quienes autorizaron el funcionamiento del hospital móvil.