Honduras no es la misma de ayer, hoy es un país listo para competir con el mundo con los productos de mejor calidad, con reglas claras para los inversionistas y con seguridad jurídica y ciudadana.
Así lo ha asegurado este jueves el presidente Juan Orlando Hernández ante decenas de inversionistas de Estados Unidos y América Latina que participan en la conferencia magistral sobre las ventajas de invertir en Honduras y los alcances del Programa de Desarrollo Económico Honduras 2020.
Entre los presentes estuvieron Roberto Martell, alcalde de Medley, Florida; Camilo Atala, presidente del Consejo Empresarial de América Latina (CEAL), y Mey Hung, vicepresidenta de la Asociación de Cámaras de Comercio de América Latina.
En el inicio de su alocución, el presidente Hernández destacó que su gobierno ha dado un fuerte impulso al sector privado, con el fin de que estos a su vez generen más empleo y más riqueza.
Destacó que para tener reglas se creó un nuevo Código Tributario con amplio respaldo, se procedió a reestructurar el sistema aduanero, se creó un Consejo Nacional de Inversiones, se lanzó la iniciativa Marca País para renovar la imagen a nivel mundial y se creó el programa Honduras 2020.
Este programa plantea crear 600,000 nuevos empleos en un periodo de cinco años, mediante el apoyo a seis sectores claves de la economía: turismo, maquila textil, manufactura intermedia de autopartes, servicios de apoyo a negocios (call center), agroindustria y vivienda social.
“Al potenciar estos sectores claves vamos a detonar la economía hondureña como ya está ocurriendo y eso lo hemos trabajado con el sector privado, no ha sido fácil ponernos de acuerdo pero tenemos un compromiso de hacerlo. En algunas cosas no vamos a estar de acuerdo pero nos respetamos”, dijo.
Hernández dijo que es plausible el esfuerzo de buenos empresarios que le están apostando al país, invirtiendo y arriesgando para generar empleos y riqueza.
Destacó que el gobierno decidió hacer una inyección de choque en el sector de infraestructura, mediante una inversión histórica con recursos propios y a través de modelos de negocios como las alianzas público privadas.
“Si ustedes van a Honduras en este momento, por el lugar que vayan van a encontrar la construcción de autopistas, carreteras, puertos, aeropuertos, pequeños aeropuertos, de tal manera que lo hemos concebido como un plan de infraestructura que le va a servir a toda la región centroamericana y al continente”, explicó.
En ese sentido, explicó a los inversionistas que lo que Honduras construye es un Centro Logístico para América y esa inversión que estará terminada en tres años, permitirá al país tener una plataforma de conectividad con el mundo.
Crecimiento social
El gobernante precisó que todo el crecimiento económico alcanzando por Honduras (3.6% en 2016) se traduce también en crecimiento social, aspecto imprescindible por ser Honduras uno de los países con mayores desigualdades en el pasado.
“Estamos trabajando fuertemente para reducir esas desigualdades”, dijo.
Para el caso, dijo que en el tema energético, se buscan precios competitivos para promover más flujo de inversión y tarifas justas y un servicio eficiente para toda la población.
Recordó que Honduras enfrenta este año un proceso electoral pero advirtió que al contrario de gestiones anteriores, el trabajo arduo desde el gobierno no se ha detenido.
Seguridad
En torno a la seguridad de Mesoamérica (Colombia, Centroamérica y México) destacó que se debe trabajar en bloque y no de forma aislada. “Ningún país puede solo con semejante desafío, en cualquiera de estos países detonante de la delincuencia es el narcotráfico en un 70 o 75%”.
Es por eso que una de sus exigencias, desde que asumió el poder de la nación, fue pedirle una responsabilidad compartida pero diferenciada a los países que son parte de la cadena del tráfico de drogas, es decir, países productores, países puente y países consumidores.
En ese sentido, el Plan Alianza para la Prosperidad que se afianza con las nuevas autoridades de Estados Unidos, tiene como base que todos acepten sus responsabilidades compartidas pero diferenciadas.
“Lo que hemos avanzado en Honduras es significativo, no lo hubiéramos hecho solo los hondureños. Debo reconocer el papel de la administración anterior y de la actual en Estados Unidos que han sido socios en esto. Nicaragua, El Salvador y Guatemala han sido nuestros socios, Colombia y México igual” reconoció.
“Ya identificamos que sí se puede y que vamos por buen camino, pero es un tema de mediano y largo plazo, de fortalecer nuestras instituciones, de una lucha frontal contra la corrupción y la impunidad y también estructurar un sistema económico incluyente que le de oportunidades a la gente, que siente que a veces no tiene ni siquiera esperanza en su país”.