Continúan los despiadados ataques por parte del gobierno de Honduras, encabezado por la presidenta Xiomara Castro, en contra de Cholusat Sur y su director el periodista, Esdras Amado López. En esta ocasión, el régimen ha recurrido a tácticas sucias, utilizando a la candidata oficialista del partido en el poder, Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, como su peón en esta batalla contra la libertad de prensa.
López ha sido blanco de una vil embestida después de que uno de sus reporteros cuestionara a la candidata Moncada sobre la fuente de financiamiento de su campaña. La respuesta fue un ataque directo a Cholusat Sur y su director, Esdras Amado López, mostrando la desesperación del gobierno ante la transparencia exigida por los medios independientes.
Rixi Moncada, la candidata impuesta por los poderosos Manuel Zelaya y Xiomara Castro, demostró su incapacidad para enfrentar la verdad al trabarse, patinar y quebrarse ante la simple pregunta de origen de fondos. Ante la incomodidad de la verdad, recurrió al ataque, insinuando que cualquier pregunta proveniente de Cholusat Sur tiene un sentido político «doble».
Desde Cholusat Sur se le recordó a la candidata Moncada que tanto el coordinador de su campaña, Carlos Zelaya, como el coordinador de su partido, Manuel Zelaya, han sido señalados por delitos de narcotráfico en Nueva York. Es evidente que el gobierno de Honduras, en su afán de ocultar sus oscuros secretos, busca desacreditar y silenciar a aquellos que se atreven a cuestionar su autoridad.
Este nuevo ataque contra Cholusat Sur y Esdras Amado López no hace sino confirmar la urgente necesidad de proteger la libertad de prensa en Honduras. La sociedad no puede permitir que el gobierno, en connivencia con poderosos intereses, pisotee el derecho fundamental a la información veraz y transparente.