El gobierno de Donald Trump anunció que deja en suspenso la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS) de Nepal y Honduras y puso el destino del programa humanitario en manos de los tribunales de justicia.
El TPS de Honduras fue cancelado por el DHS el 4 de mayo del 2018 y concedió una última extensión hasta el 5 de enero del 2020. El TPS de Nepal, por su parte, fue cancelado el 26 de abril del año pasado y el gobierno le otorgó una última extensión hasta el 24 de junio del 2019.
El TPS de Honduras fue cancelado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y concedió una última extensión hasta el 5 de enero del 2020 para unos 56 mil beneficiarios.
El TPS de Nepal, por su parte, fue cancelado el 26 de abril del año pasado y el DHS le otorgó una última extensión hasta el 24 de junio de 2019. El programa protege de la deportación a unos 12 mil nepalíes, quienes además reciben una autorización de empleo mientras dura el amparo.
La decisión permite que los beneficiarios del TPS de ambos países conserven su estatus legal temporal mientras una Corte Federal decide el futuro de los amparos provisionales.
En febrero de este 2019, ciudadanos de Honduras y Nepal interpusieron una demanda colectiva en busca de detener la terminación ilegal de Estatus de Protección Temporal (TPS) para más de 100 mil ciudadanos de ambos países.
Felicidad en comunidad hondureña
El representante de la Asociación de Hondureños del Norte de California, Porfirio Quintano, se mostró optimista por la decisión de un juez norteamericano de dejar en suspenso el TPS.
“Siempre hemos dicho que los migrantes de nacionalidad nepalíes y hondureños tienen los mismos beneficios de la demanda que se interpuso en marzo del año pasado, por lo que una determinación judicial preliminar ordenó a la administración del Donald Trump, que no podía terminarlo –TPS- sin ir a un debido proceso”, dijo Quintano.
En ese sentido añadió que “al mismo tiempo tenía que decidir o dar una información que iba a tener al dar la decisión preliminar; en efecto la administración del Donald Trump respondió que mientras existía la demanda, los cuatro países seguirían con ampliaciones automáticas por nueve meses, es decir que a partir del 5 de febrero del próximo año los hondureños tienen nueve meses de extensión”.
Indicó que este tipo de medidas “solo es una extensión para que siga la lucha por lograr mejores condiciones, pero no llevan a nada, solo es para ganar tiempo, por eso invitamos a todos los hondureños a que se unan, porque esto no significa que hemos ganado, ya que lo que se necesita es una legalización del TPS”.