El fundador de iglesias evangélicas, empresario zacapaneco y gestor de créditos bancarios, Julio César Aldana Franco, es considerado por la fiscalía como pieza clave de la estructura criminal que lideraron Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti. Aldana Franco está implicado en un nuevo caso contra los exgobernantes por lavado de dinero de acuerdo a la imputación leída en una audiencia cuya grabación fue filtrada a ContraPoder.
El empresario zacapaneco, de acuerdo a los hallazgos de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci),intermedió para que el Banco de Desarrollo Rural (Banrural) otorgara préstamos a la red de sociedades de cartón que utilizaron Pérez y Baldetti para canalizar los fondos que obtenían de sobornos y donaciones de campaña ilegales. Los créditos habrían servido para justificar el ingreso a estas sociedades anónimas de grandes cantidades de dinero de procedencia ilícita; es decir, para lavar dinero. Este método es considerado una de las tipologías clásicas de este delito.
Aldana Franco gestionó para la exvicepresidenta Baldetti al menos Q100 millones en préstamos en Banrural, según estableció Contrapoder. A comienzos de 2015, también comenzó a trabajar para Pérez, aunque no llegó a completar la estrategia de lavado que ejecutó para la exmandataria precisamente por la captura de Estuardo González, el administrador del grupo de empresas, y la fuga de Juan Carlos Monzón, el cobrador de la estructura.
Aldana Franco, por ejemplo, consiguió para una empresa controlada por Baldetti, en 2012, un préstamo hipotecario de Q25 millones y ofreció como garantía un finca en Coatepeque de 5 hectáreas que había sido adquirida por Q2.1 millones. Los Q25 millones, en teoría, se debían utilizar para desarrollar un condominio llamado Valle de las Gardenias, pero la mayor parte del dinero terminó por circular entre las sociedades que administraba Estuardo González, como expuso una fuente cercana los negocios de la vicepresidenta.
TRABAJÓ EN EL GRUPO DINANT DE HONDURAS
Aldana Franco, de 45 años, trabajó como ejecutivo del hondureño Grupo Dinant, y después comenzó su carrera en el negocio bancario como colocador de préstamos para el Banco del Café. En 2008, Construgua, una empresa de Aldana representada por su hermana, fue contratada por Banrural para incursionar en los servicios de banca privada, enfocada en los grandes patrimonios. Banrural le instaló a Aldana Franco una agencia en su oficina del Edificio Paseo Plaza, zona 10, donde el empresario atendió hasta el año pasado a clientes prósperos y a altos funcionarios.