Estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) entregaron de forma voluntaria y pacífica las instalaciones de la máxima casa de estudios tras dos días de una toma total.
Con los rostros cubiertos, agarrados de sus manos y con flores amarrillas entre sus dedos, los manifestantes abandonaron la UNAH a través de una valla de protección formada por otro grupo de estudiantes.
El desalojo se da luego que elementos de la Policía Nacional Antimotines y del escuadrón Cobras llegaran a las instalaciones para efectuar el desalojo de los estudiantes.
Desde ayer lunes en horas de la mañana un grupo alumnos se tomó Ciudad Universitaria en protesta de las nuevas normas académicas implementadas por las autoridades del ente de educación superior.
La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos anunció que hasta el jueves se reanudarán las actividades académicas en Tegucigalpa.
Castellanos dijo que este miércoles se desarrollaran de manera normal lasactividades administrativas en la UNAH.
Sin embargo, la rectora criticó que no se realizó el debido proceso para el desalojo de los estudiantes que mantenían cerrada la UNAH.
“Por la interferencia indebida de la Policía Nacional y la ausencia de un juez ejecutor no es posible que podamos ingresar a la universidad, porque se tiene dar fe de las condiciones en las que se reciben las instalaciones”, aseguró Castellanos.
Asimismo explicó que el periodo académico se extenderá entre seis y siete días, dependiendo de las carreras.
Para el caso, para la carrera de Derecho perdió 3 días de clases; Odontología y Química y Farmacia serán de 4 días; mientras que para Ingeniería, el periodo se extenderá 7 días.
En Psicología, Periodismo, Lenguas Extranjeras, Letras, Matemáticas y Física, 7 días; para Sociología, Historia y Trabajo Social será de 6 días; y para el caso de estudios generales será de 7 días.
“Esto se debe a que se registraron varias tomas de manera intermitente en los diferentes edificios, por horas y días, pero solo es válido para Tegucigalpa”, explicó Castellanos.
Cuando los estudiantes abandonaron la UNAH, la Policía Nacional resguardó las instalaciones, a la espera de un juez ejecutor para verificar las condiciones en que se encuentra el campus.