Joaquín «el Chapo» Guzmán Loera podría no alcanzar a ser extraditado de México a Estados Unidos y morir en los próximos meses debido a su deteriorado estado de salud, afirmó uno de los líderes del equipo legal del narcotraficante.
Andrés Granados dijo que Guzmán podría fallecer pronto si continúa recibiendo «malos tratos» dentro de la prisión de la fronteriza Ciudad Juárez, en el norteño estado de Chihuahua, en el que se encuentra desde mayo pasado.
«Así me lo comentó él (Guzmán). Su estado de salud está deteriorado, él se siente mal, le están quitando el medicamento. Parece que el Gobierno federal lo quiere matar antes que extraditar», dijo el letrado, entrevistado en el aeropuerto de Ciudad Juárez después de visitar al reo.
Aseguró que su cliente le dijo «que piensa que no la va a hacer (sobrevivir) hasta diciembre por su estado de salud», ya que «su organismo ya no puede y Dios no lo quiera el señor puede fallecer».
Guzmán, de acuerdo con la defensa, está tomando más de cuatro medicamentos para el dolor de cabeza, antidepresivos y ansiolíticos, entre otros fármacos.