El papa Francisco solicitó mediante una iniciativa la investigación del Banco del Vaticano para conocer y controlar los casos que han sido expuestos donde se señala se hicieron actividades de lavado de activos.
La iniciativa faculta a la Autoridad de Inteligencia Financiera vaticana para reformar y controlar irregularidades además de ser el organismo rector de las actividades que requieran manejo financiero de parte del estado vaticano.
En este sentido el banco oficial vaticano, el Instituto para las Obras de Religión (OIR siglas en inglés) fue investigado por un reporte que señala que del año 2000 al 2011 se dio actividad financiera entre la institución y bancos en Suiza.
La indagatoria señala que la Santa Sede tuvo presencia a través de un departamento denominado Administración del Patrimonio de la Santa Sede (APSA), desde donde se realizaron movimientos importantes con las instituciones financieras suizas, según reportó la agencia Reuters.
Su Santidad, Francisco determinó emprender acciones contra la serie de escándalos en los que se ha visto envuelto el Banco vaticano, siendo la más importante acción la designación de un nuevo auditor general, la instauración de un ministerio para investigar y supervisar las actividades económicas de todos los departamentos de la Santa Sede.