El vicepresidente de Estados Unidos Joe Biden pidió ayuda a abogados y grupos de asistencia legal que representan a menores inmigrantes detenidos en la frontera.
Señaló que el mundo juzgará a Estados Unidos por la manera en que trate a estos niños.
Estados Unidos no debe pensar que los menores solos que llegaron a la frontera son los niños de alguien más, dijo Biden. «Son nuestros niños», dijo.
Aseguro que entiende la absoluta desesperación de los padres que pagan a personas sin escrúpulos que introducen a los niños sin autorización a Estados Unidos.
No obstante, advirtió que Estados Unidos tendrá que devolver a algunos de los menores a malos entornos porque no reúnen los requisitos necesarios recibir asilo.
Biden también sostuvo que los gobiernos centroamericanos no están preparados para tomar decisiones drásticas para resolver los problemas que causan la inmigración.