El presidente Juan Orlando Hernández destacó hoy, en la inauguración de la modernización de la aduana El Poy realizada por el Gobierno de El Salvador, que la Unión Aduanera tiene como objetivo generar empleos y oportunidades así como convertir a la región en la octava economía más fuerte del continente.
Ese avance redundará en bienestar para los pueblos participantes del proceso de integración, dijo Hernández, que junto a sus homólogos de El Salvador y Guatemala, Salvador Sánchez Cerén y Jimmy Morales, inauguraron la primera fase de adecuación del puesto fronterizo integrado El Poy, en Chalatenango.
Entre las obras ejecutadas en esta primera etapa destacan la construcción de dos domos con sistema neumático tipo autobanco para el traslado de documentos, casetas para la atención de mercancías en libre circulación, la ampliación de carriles para el tránsito de vehículos, así como de la entrada y salida de la aduana.
Las mejoras son producto del proceso de Unión Aduanera que impulsan de forma decidida las tres naciones y con la cual se busca convertir a la región en la octava economía más fuerte de Latinoamérica, con un mercado de 32 millones de habitantes y que representa un 73% de la población de Centroamérica.
«Esto es algo trascendental y por eso los pueblos debemos estar unidos siempre. En el bienestar común está el crecimiento de todos. Y esto nos permitirá crecer de una manera importante y grandiosa por medio de la Unión Aduanera», dijo Hernández.
Recordó que, hace muchos años, «quisimos unir a los dos países Honduras y El Salvador por medio de un puente sobre el río Lempa; lo hicimos y eso significó un compromiso importante entre los dos países y ha sido un gran ejemplo para tomar con fuerza este punto de la Unión Aduanera».
A más personas, mercados mayores
El titular del Ejecutivo afirmó que para la región será más fácil fortalecer sus relaciones comerciales con mercados más exigentes, más grandes y competitivos.
«Esto es simple de entender y es que, en la medida que más personas estén en el mercado, podemos encontrar más beneficios y más empleos y obtener un mejor nivel de vida para nuestros pueblos», indicó Hernández.
«No es lo mismo comprar en un mercado con pocas personas”, dijo para luego destacar “el tamaño que representa esta Unión Aduanera y es el 57% del territorio de Centroamérica y el 73% de la población de la región y con esos nos convertimos en la octava economía más fuerte de América Latina».
Hernández remarcó el deseo de los países del Triángulo Norte de fortalecer este esquema comercial y ampliarlo a los países vecinos.
«Ahora invitamos a Nicaragua a unirse a este proceso y ha quedado evidenciado que cuando se quiere y hay voluntad se pueden hacer bien las cosas», manifestó el gobernante hondureño.
Recordó que todos los años «en Honduras esperamos a los hermanos salvadoreños en las Ferias Agostinas y ese ha sido un punto fuerte para el turismo porque se ha avanzado mucho ahora en temas aduaneros y de rápido tránsito en Honduras».
Todos los esfuerzos de la Unión Aduanera, afirmó, “contribuyen de manera directa para erradicar la migración, porque genera mucho comercio, empleos, inversiones y oportunidades de ingresos”.
Hernández expuso que México también se ha comprometido a trabajar de manera directa con los países del Triángulo Norte y eso implica un trabajo a destacar a favor de la región.
Avances
Las mejoras en el puesto fronterizo El Poy tienen prevista una segunda etapa que comprende la construcción del Centro de Control Migratorio Hondureño, incluyendo además la pavimentación total del recinto.
Este sustancial avance en la frontera El Poy aportará beneficios a los usuarios: atención y control conjunto, agilidad en la libre circulación, realización de una parada única, tránsitos comunitarios, despacho desde el ingreso en periferia, trabajo coordinado en puestos fronterizos y reducción de tiempos en el cruce de vehículos.
Con este proceso de integración aduanera los países del Triángulo Norte sumarán un Producto Interno Bruto de 126.000 millones de dólares, aproximadamente la mitad del PIB regional.
Este puesto fronterizo constituye un punto estratégico del comercio regional. En 2018, al mes de noviembre se han registrado alrededor de 30.000 exportaciones por un valor de 826 millones de dólares.