A tres días de las elecciones primarias en Honduras, la violencia política ha mostrado un preocupante aumento en el país. De acuerdo con el último reporte del Instituto Universitario en Democracia, Paz y Seguridad (IUDPAS) de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), 42 hondureños han sido víctimas de violencia política, mientras que 98 personas más se han visto involucradas en 58 conflictos políticos desde el inicio de la campaña electoral.
El informe, presentado este jueves, revela detalles alarmantes sobre los diferentes tipos de violencia registrados, destacando que en total se han producido 9 homicidios, 8 agresiones simbólicas, 6 atentados, 5 intentos de coacción o intimidación, y 5 casos de difamación. También se reportan 3 agresiones físicas, 2 amenazas a la vida y 2 incidentes relacionados con daño al patrimonio y discriminación.
En términos de afiliación política, el Partido Liberal lidera las víctimas, con 15 personas atacadas, seguido de cerca por el Partido Libertad y Refundación (LIBRE), con 14 afectados. El Partido Nacional reporta 7 víctimas de violencia política. Además, representantes de la sociedad civil y de organismos electorales también han sido blanco de ataques, con 2 víctimas por sector. Incluso, en algunos casos, personas sin afiliación partidaria fueron afectadas por la violencia relacionada con actividades políticas.
Los departamentos con mayor incidencia de violencia política incluyen Francisco Morazán, con 18 casos registrados, seguido por Copán, Atlántida, y Cortés, entre otros. El Distrito Central, la capital del país, concentra el 73% de los hechos violentos reportados. La mayor parte de los incidentes violentos se ha dado en manifestaciones públicas (16) y en actividades políticas (9).
Además de los actos violentos, el informe también señala que se han producido 58 conflictos políticos, los cuales involucran disputas verbales o discursivas entre grupos con intereses contrapuestos. Estas disputas han surgido principalmente por desacuerdos sobre la dinámica interna de los partidos políticos, legitimidad de los resultados de las elecciones, reformas electorales y alianzas.
En cuanto a la conflictividad interna de los partidos, se destacan desacuerdos sobre la fuente de financiamiento (10 casos), inscripciones de corrientes y candidatos (9), y cuestiones ideológicas (7). El informe también identifica una creciente deserción de miembros y confrontaciones entre actores dentro de los mismos partidos.
La UNAH, a través del IUDPAS, ha monitoreado estos hechos con el fin de ofrecer a las autoridades, partidos políticos y la ciudadanía información clave que permita visibilizar la problemática y sugerir medidas para abordarla antes y después de las elecciones.