Este día, los conductores de autobuses que cubren la ruta a la colonia Cerro Grande de la capital, han decidido paralizar sus unidades debido a que los grupos de extorsionadores le ha subido al cobro del mal llamado impuesto de guerra, o cobro de extorsión.
Cabe mencionar, que según las declaraciones de los afectados, ya no aguantan tanta organización criminal amenazandolos por el pago de la extorsión.
“Nos están extorsionando, cobrándonos de más, no tenemos dinero, nos amenazan con matarnos si no pagamos”, señaló uno de los conductores, que cubre la ruta hacia la Cerro Grande.
En ese sentido, Son 45 las unidades las que se paralizaron en la terminal de buses este viernes.
No obstante, los motoristas de estas unidades exigen a las autoridades mayor seguridad e investigaciones profundas sobre los que realizan el cobro de la extorsión a este rubro de transporte,