La decisión del presidente Donald Trump de aplazar su discurso del Estado de la Unión bajo presión de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, sorprendió a sus aliados, contradijo a sus asesores que ideaban un plan alternativo y dejó a todo Washington tratando de determinar su es un indicio de una nueva disposición del mandatario para alcanzar un acuerdo y poner fin al cierre parcial del gobierno.
“Bueno, en realidad es decisión de ella”, declaró Trump el jueves, reconociendo que es prerrogativa de Pelosi fijar la fecha en la que el presidente debe rendir su tradicional mensaje ante el Congreso. La presidenta de la cámara baja había dejado claro que Trump no podría pronunciar su discurso en el recinto legislativo a menos que esperara hasta que el gobierno reanudara operaciones.
Así pues, Trump, que típicamente odia dar señales de debilidad, hizo un radical cambio de postura, lo que realza la importancia que él confiere al simbolismo y pompa que revisten pronunciar un discurso desde el podio de la Cámara de Representantes.
El presidente ha concluido que no hay alternativa viable que iguale la gran dignidad que reviste pronunciar el tradicional mensaje del Estado de la Unión en un acto que atrae la mayor audiencia televisiva del año para el presidente y en la cual participan los tres poderes del gobierno.
Un discurso o un acto político alternativos habrían causado problemas a las cadenas de televisión, que fueron muy criticadas este mes por transmitir un discurso del presidente desde la Oficina Oval a la hora de mayor audiencia y en el que básicamente reiteró sus exigencias para la construcción del muro en la frontera sur.
“Lo habría pronunciado en otra parte, pero me parece que sería una falta de respeto al Estado de la Unión”, declaró Trump el jueves. “Podría haber ido a un gran auditorio y reunido a 25.000 personas en un solo día, como se ha hecho en muchos otros actos. Pero creo que habría sido una gran falta de respeto para el Estado de la Unión”.
Trump incluso elogió la decisión de Pelosi y la describió como “en verdad razonable”, aunque la había criticado el día anterior.-AP