Un supuesto narcotraficante hondureño pedido en extradición por Estados Unidos fue capturado hoy en la capital guatemalteca, informó una fuente oficial.
El portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC), Jorge Aguilar, dijo que agentes antinarcóticos detectaron al hondureño William René Reinieri Medina Escobar en la parada de un transporte público en la zona 1 de la ciudad.
Sin entrar en mayores detalles, Aguilar dijo que Medina tiene una solicitud de extradición en Estados Unidos y que ya ha sido trasladado a la torre de tribunales de Guatemala.
El pasado sábado fue detenido en Guatemala el “peligroso” narcotraficante hondureño conocido con el alias de “El Rojo” que también es requerido por Estados Unidos.
El Ministerio Público (MP-Fiscalía) indicó en un comunicado que el hombre, identificado como Víctor Hugo Díaz Morales y/o Víctor Manuel Villegas Castillo, está acusado de delitos relacionados con el narcotráfico.
La captura se produjo en la zona 10 de la capital tras un “trabajo de inteligencia antinarcótica de varios meses” en contra del presunto narcotraficante, “el segundo más buscado de Honduras”, dijo la Policía Nacional Civil (PNC).
En su contra hay una orden de extradición de la Corte Distrital del Distrito Sur de Nueva York por los delitos de “conspiración para importar dentro de los Estados Unidos cinco kilogramos o más de cocaína.
Según la policía guatemalteca, está considerado un “peligroso narcotraficante” en toda la región centroamericana.
El 90 % de la cocaína que llegó al mercado de Estados Unidos en 2016 pasó por el corredor centroamericano, de acuerdo con el informe anual del Gobierno sobre narcotráfico en el mundo, que incluye a Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, El Salvador y Costa Rica entre los mayores países de tránsito de drogas del mundo.
Sobre Guatemala, el documento advierte que por el país se trafican alrededor de 1.000 toneladas métricas (MT) de cocaína al año, la gran mayoría destinadas al mercado estadounidense, aprovechándose de “las fronteras porosas” del país, la sobrecarga de las agencias policiales y la “ausencia de una presencia permanente” de las fuerzas del orden.-ACAN-EFE