Una vez más la playa de Omoa en el departamento de Cortés amaneció plagada de desechos y basura proveniente de Guatemala.
El lugar turístico se ha convertido los últimos años en el botadero del hermano país ante la vista y paciencia de las autoridades nacionales que no han hecho nada para poner orden ante la situación.
De muy poco han servido las medidas de prevención que la Secretaría de MiAmbiente estableció para evitar que la basura llegue a la zona, ya que el problema prevalece con la severidad de siempre.
De su lado, las autoridades municipales sostienen que la basura que está llegando a las playas de ese municipio turístico es de Guatemala, a través del río Motagua.
Dicho río, es sumamente caudaloso, arrastra grandes promontorios de basura y la barda que han colocado no es suficiente para contener tantas toneladas de residuos, indicó la municipalidad.