«Hicieron decenas de propuestas para modificación y por supuesto, lo que es perceptible y modificable para ser más claro sobre los objetos que se persiguen, serán siempre bienvenidos, sería absurdo pensar que nos vamos a oponer», dijo.
Actualmente la reforma tributaria establece la derogación de 16 regímenes fiscales (a cambio se crearían dos nuevos) con el objetivo de controlar los abusos en las exoneraciones fiscales, algo que ayudaría a minimizar la necesidad de endeudamiento de Honduras, según Rixi Moncada.
«El país no ocupa endeudarse si todos pagamos impuestos, si todos estuviéramos trabajando por la línea honesta. Si avanzamos en la lucha contra la corrupción estructural la deuda que tuviéramos que contratar no sería para pagar otra deuda», expuso.
Para la ministra, esto último se derivaría en beneficios sociales en salud y educación, así como tener los recursos para pagar deuda pública, -este año se pagarán 58 mil millones de dólares-, y evitar que crezca.
El diputado del Partido Nacional (oposición), Nelson Márquez, aseguró que la Ley de Justicia Tributaria ‘tiene buen nombre, pero, no es como suena’, pues no está definido qué hará el Gobierno con el dinero que pagarán las empresas que comenzarán a liquidar con la derogación de regímenes.
«Esta plata (que se recaudará quitando exoneraciones) es para sacar a la gente de la pobreza o para es exclusivamente para financiar el proyecto político de Libertad y Refundación (Libre), porque para eso es que lo quieren», externó.