Al estilo de los emperadores de Roma, cuando al pueblo le daban pan y circo, Juan Orlando Hernández se invento un torneo deportivo, que lejos de darle seguridad al pueblo ya cobro su primera victima.
En la “Copa Presidente” se enfrentan 64 equipos de futbol y en el partido que enfrento al Olimpia con el Estrella Roja de Danlí, Juan Orlando Hernández estuvo presente para el saque inicial.
Sin embargo, una vez más la violencia empañó la jornada debido a la muerte de una aficionado local.
La barra Ultrafiel que celebraba por la victoria 5-0, a la salida del Estadio Marcelo Tinoco, empezo una serie de agresiones verbales entre los simpatizantes del Estrella Rojas.
FUSINA aseguro que un joven de 18 años, insatisfecho con el resultado, habría lanzado frases inapropiadas contra los seguidores del Olimpia, los que molestos reaccionaron con acciones violentas.
Pero el acto violento no terminó allí, al menos 30 miembros de la Ultrafiel dieron seguimiento al joven hasta ubicarlo en su vivienda en Jacaleapa, un municipio que se ubica a unos 10 minutos de Danlí.
Los jóvenes enardecidos ingresaron a la vivienda del muchacho y lo atacaron. Fueron tres impactos de bala los que le cegaron la vida.
La víctima fue identificada como Cristian Fabricio Flores (18).
En el ataque una mujer junto a su bebé también resultaron lesionadas, producto de los golpes que les profirieron los miembros de la Ultrafiel.
Juan Orlando Hernández aseguro que daría seguridad a todos los hondureños y el hecho de que el estuviese con sus cuerpos de seguridad suponía que ningún caso como el ocurrido se iba a registrar.
Lamentablemente ese suceso ocurrido en Danlí es una muestra de la situación delictiva en toda Honduras.