El presidente Juan Orlando Hernández reprochó este viernes que criminales y asesinos confesos busquen dañar la institucionalidad del país y atacar a las personas que se han ido de frente en contra del narcotráfico, logrando reducir la tasa de homicidios en un 60% y el paso de droga en un 83%.
El mandatario hizo estos señalamientos durante la ceremonia del 139 Aniversario de la Policía Nacional que se llevó a cabo en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad en Tegucigalpa.
Aseguró que muchos narcotraficantes se encuentran en los Estados Unidos tratando de reducir sus penas con ridículas acusaciones en contra de las instituciones y de las personas que los enfrentaron aun exponiendo sus vidas.
«Ellos son asesinos confesos, no de uno o de dos asesinatos, son asesinos múltiples, y hoy hacen esas ridículas acusaciones contra las instituciones y las personas que expusimos nuestras vidas al tomar las decisiones necesarias para cambiar el rumbo del país, pero aquí en Honduras todos nos conocemos y, como dice el dicho, entre cielo y tierra no hay nada oculto y la verdad siempre sale a la luz», manifestó el gobernante hondureño.
Hernández reafirmó que no bajará los brazos y no descansará nunca en la lucha contra el narcotráfico, porque es una lucha justa, por la vida y por la libertad del pueblo hondureño.
«Los buenos hondureños estamos bajo ataque de aquellos que le pusimos fin a su reino de terror y que pasaron de ser amos y señores de ciertos territorios en el país a estar tras las rejas, unos aquí en Honduras, otros en los Estados Unidos, y otros siguen huyendo», expresó.
Aseguró que los criminales que enfrentan la justicia estadounidense quieren vengarse de una generación de valientes hondureños y de instituciones nobles que dijeron ‘basta ya’ y tomaron el reto de derrotar y de irse de frente en contra del crimen organizado, sea narcotráfico, maras, pandillas.
Los patos le tiran a las escopetas
Hernández declaró que actualmente el país tiene dos bandos, en uno de los cuales están los criminales que quieren volver a gobernar el país como un día lo hicieron y van a tratar de hacerlo con acusaciones falsas para intimidar y que nunca nadie más se atreva a enfrentarlos.
«El otro es el bando de quienes nos respaldan los hechos, a quienes los hechos nos acompañan de haberle devuelto la paz y la tranquilidad al pueblo de Honduras y a los que seguimos con el compromiso de seguir trabajando por la paz y seguridad del país», dijo.
Como se dice popularmente, ahora los patos le disparan a las escopetas y «nos presentan como los malos de la película de terror, buscan reducir sus penas, vengarse, pero estamos dispuestos a seguir haciendo lo que tenemos que hacer por nuestras familias y por nuestra patria», aseveró.
«Lo prometimos y estamos cumpliendo. Dicho y hecho: a los delincuentes se les acabó la fiesta y créanme compatriotas que estos angelitos no están contentos; les cerramos un negocio valorado en estos últimos años en 24 mil millones de dólares, por lo que estos asesinos serían capaces de vender a su propia madre por rebajar sus condenas y también para vengarse», dijo.
Mienten ridículamente
El gobernante hondureño declaró que es prohibido olvidar que narcotraficantes y criminales infiltraron diferentes sectores de la sociedad y vivían a sus anchas haciendo todo tipo de fechorías en completa impunidad, sin castigo alguno.
Hoy Honduras es un ejemplo a nivel mundial por sus logros en materia de seguridad; queda mucho por hacer y hay que redoblar esfuerzos para seguir construyendo un país que ofrezca cada vez más a sus habitantes una vida digna y con oportunidades, consideró.
Recordó que un informe del Departamento de Estado indicaba que en 2013 por el país pasaba el 87% por ciento de la droga; hoy, el mismo reporte indica que el paso se redujo a un 4%, lo que representa una reducción de 83%, por lo que Honduras ya no es el puente de la droga del sur hacia al norte.
Producto de la lucha frontal contra el crimen organizado, ya sea narcotráfico, maras y pandillas, Honduras logró reducir en un 60% la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes pasando de 87 homicidios a 37, dijo.
Indicó que estas reducciones son el resultado de varias acciones lideradas mediante un trabajo articulado con operadores fortalecidos y con decisiones claves como la extradición, que fue aprobada bajo todo tipo de presiones, pero que dio paso a que hoy 23 criminales enfrenten la justicia en los Estados Unidos.
«Hoy estos delincuentes están enfrentando la justicia, están en la cárcel, unos aquí en Honduras, otros en los Estados Unidos. Se les ha quitado sus bienes, su libertad, y buscan a cualquier precio bajar sus penas, recuperar sus bienes, y lo hacen mintiendo ridículamente, engañando, acusando ilógicamente a las instituciones y a las personas que decidimos enfrentarlos», increpó.