El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, demandó este jueves en Guatemala a los presidentes del Triángulo Norte de Centroamérica frenar el “éxodo” de migrantes ilegales a su país, al considerar que amenaza a la seguridad de los estadounidenses.
“Les digo con gran respeto a los presidentes aquí reunidos que este éxodo tiene que terminar, es una amenaza a la seguridad de los Estados Unidos y, como nosotros respetamos su soberanía, sus fronteras, nosotros insistimos que ustedes respeten la nuestra”, declaró Pence en el Palacio Nacional de la capital guatemalteca.
Pence se reunió con los presidentes Jimmy Morales de Guatemala, Juan Orlando Hernández de Honduras y Salvador Sánchez Cerén de El Salvador, en momentos en que hay una crisis en Estados Unidos por la aplicación de la política de “toleracia cero” que ha provocado la separación de más de 2.000 niños de sus padres migrantes, detenidos al cruzar la frontera.
El vicepresidente de Estados Unidos señaló que de los miles de centroamericanos que llegan a su país en busca de asilo, “son pocos los que están escapando de una persecución” por violencia.
“La mayoría (de migrantes) están buscando mejores oportunidades económicas creyendo que pueden no cumplir las leyes de Estados Unidos y entrar a nuestro país sin consecuencias”, indicó Pence.
Aseguró que “entre la ola de migrantes” que llegan a Estados Unidos hay miembros de las pandillas, entre ellas la Mara Salvatrucha (MS-13), perseguida por la administración del presidente Donald Trump.
Ante la crisis de la separación de familias migrantes, Pence pidió a la población de los tres países abstenerse de viajar sin papeles y utilizando traficantes, conocidos como “coyotes”.
“No pongan en juego su vida y la vida de sus hijos. Quédense en sus hogares, en su patria”, insistió el funcionario.
“Vengan legalmente, si no, no lo hagan”, sentenció al exigir también a los gobernantes centroamericanos “tomar acciones más urgentes que en el pasado” para detener la migración ilegal con campañas contra las redes de tráfico de personas y señaló que su gestión seguirá apoyando “a sus vecinos”.
El presidente hondureño Hernández, dijo por su parte, que trabajarán para “retomar el concepto” de “atacar la raíz” de los problemas que generan la migración como el tráfico de personas, el narcotráfico y el mercado negro de armas.
Sánchez Cerén agregó que tras la reunión se esperan obtener “propuestas concretas” para disminuir el flujo de migrantes, mientras que Morales pidió a Estados Unidos hablar de una reforma integral migratoria.-AFP