Una quinceañera que asistió al estadio con la ilusión de disfrutar de un partido de fútbol es la víctima mortal del odio enfermizo entre antisociales que se dicen fanáticos de los equipos Marathón y Real España de San Pedro Sula.
La noche del miércoles, barristas de los equipos sampedranos protagonizaron un zafarrancho en el estadio Olímpico de San Pedro Sula y tras ser sacados por agentes policiales, continuaron con el enfrentamiento armado en las afueras del recinto deportivo.
Lamentablemente, una de las balas impactó contra la humanidad de Keiry Gricel García Baide, de 15 años de edad, quien fue trasladada mortalmente herida a un centro médico privado, donde lamentablemente falleció.
Se informó que la quinceañera recibió un disparo en su cabeza que fue el que le quitó la vida, mientras que las autoridades ni siquiera han identificado al asesino que acabó con su vida.