La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), demandaron “medidas urgentes” para garantizar los derechos de los privados de libertad tras los amotinamientos de la tarde del sábado que dejaron 11 heridos y un muerto.
El oficial del organismo mundial expresó su preocupación por los episodios de violencia en cuatro cárceles hondureñas: Ilama, Morocelí, El Porvenir y Támara.
“Los hechos sólo evidencian la deficiencia estructural en materia de hacinamiento, gestión penitenciaria y garantía de seguridad integral de las personas privadas de libertad”, reza el comunicado oficial de OACNUDH.
Piden al Estado hondureño tomar medidas urgentes para garantizar la seguridad de todas las personas que están bajo su custodia y particularmente las que están en condición de vulnerabilidad.
Asimismo, instan a llevar a cabo una investigación exhaustiva, independiente e imparcial sobre los hechos de violencia y violaciones de DDHH ocurridos en los centros carcelarios, así como garantizar el acceso a la justicia para las víctimas.
La oficina reitera su compromiso al Estado de Honduras en la promoción y protección de los DDHH, y llama a adoptar medidas de seguridad y gestión penitenciaria que incorporen las reglas mínimas de las Naciones Unidas del Tratamiento de los Reclusos (Reglas de Mandela).