La Oficina en Honduras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos externó su condena a los incidentes que durante un desalojo en Río Blanco, San Pedro Sula, que desencadenaron en la muerte del joven Rafael Flores de apenas 24 años.
“Durante una pandemia los desalojos forzosos son aún más detestables y pueden constituir una grave violación de la ley humanitaria.”, afirmó el Relator Especial de la ONU, Balakrishnan Rajagopal, sobre el derecho a la vivienda.