El paréntesis sólo se prolongó un año para el Movimiento Al Socialismo (MAS) en Bolivia. La revolución indígena rompió perspectivas y encuestas para barrer de forma sorprendente a la oposición en los comicios presidenciales y legislativos celebrados ene domingo, las segundas elecciones en el continente desde que estallara la pandemia.
Dos encuestas a pie de urna constataron que Luis Arce presidirá Bolivia tras obtener más del 50% de los sufragios, con una abstención muy pequeña en torno al 15%. Veinte puntos de ventaja sobre Carlos Mesa, candidato centrista de Comunidad Ciudadana, y 35 puntos sobre el radical Luis Fernando Camacho.
De esta forma Arce rompe incluso el techo de los últimos duelos electorales protagonizados por Evo Morales. Tanto la presidenta interina, Jeanine Áñez, como el candidato derrotado así lo reconocieron. «Doy un gracias muy sentido al pueblo boliviano por su compromiso democrático. Nos toca ser cabeza de oposición. Honraremos a Bolivia», escribió Mesa en sus redes tras permanecer en silencio durante toda la noche electoral.
Tras estos resultados, Luis Arce se convierte en el hombre del año en el país andino. No sólo lideró una campaña electoral que recorrió ciudades y campo en medio de la pandemia, sino que se estrenó como virtual presidente electo con un discurso moderado y reconciliador, tan alejado del usado durante 14 años por su jefe de filas. Tan cuidadoso fue con las formas, que ni siquiera nombró y citó al ex presidente Morales.
«Vamos a gobernar para todos los bolivianos, vamos a construir un gobierno de unidad nacional», enfatizó Arce en tono conciliador, decidido a superar «nuestros errores» y a reconducir «el proceso de cambio sin odio».
El ex ministro de Economía de Morales, artífice del milagro económico de la revolución, adelantó que su primera medida será la puesta en marcha del bono contra el hambre, así como fortalecer la demanda interna. Su vicepresidente, el ex canciller David Choquehuanca, declaró en términos parecidos, confirmando lo que ya adelantaron durante su campaña electoral.