El Gobierno mexicano se prepara para recibir más refugiados ante la crisis causada por la pandemia, indicó este martes Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (Segob).
«México tiene que estar preparado para recibir a personas de distintas nacionalidades que se incorporarán al país, y por ende a su economía, sociedad y cultura», manifestó Encinas en el evento “Atención a los Refugiados en el Marco de la Pandemia”.
La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) ha recibido solicitudes de 36.454 personas en los primeros 11 meses de 2020.
Este es un incremento cercano al 38 % frente al mismo periodo de 2018, aunque es una disminución de alrededor de 60 % frente a 2019, cuando México recibió un récord de 67.253 solicitudes.
Honduras encabeza las solicitudes registradas por la Comar en 2020 con 13.404 personas, seguido por Haití con 5.314, Cuba con 4.893, El Salvador con 3.629 y Venezuela con 3.119.
El resto son de otros países de América Latina, como Guatemala, Chile, Nicaragua, Brasil y otras naciones no especificadas.
Pese a la pandemia, Encinas aseveró que el Gobierno declaró como actividad esencial el registro de refugiados para evitar su interrupción.
En este periodo, compartió, se han registrado 19.263 personas y se han resuelto 18.083 casos.
Ante este panorama, el subsecretario de Segob afirmó que México creará un «nuevo paradigma» en materia de migración y refugio para el ejercicio pleno de los derechos humanos.
“Tenemos una gran recepción, en el territorio nacional tenemos alrededor de un millón de personas de otras nacionalidades viviendo en nuestro país, que es un porcentaje mínimo si lo comparamos con los flujos migratorios en Europa”, expresó.
En el evento, en vísperas del Día de los Derechos Humanos que se conmemora el 10 de diciembre, participaron también el titular de la Comar, Andrés Ramírez, y el representante en México de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), Mark Manly.
El representante de las Naciones Unidades enfatizó que el derecho de buscar y recibir asilo es esencial en el contexto actual.
«Estamos hablando de algo tangible y que abre la puerta al ejercicio de otros derechos humanos, implica que la persona que viene huyendo de una situación de guerra, violencia generalizada o violaciones serias a sus derechos humanos deba tener la posibilidad de entrar a otro país», opinó Manly.
A pesar del discurso oficial, organizaciones civiles publicaron un reporte en octubre en el que denunciaron la detención de más de 50.000 migrantes y la muerte de al menos 33 de ellos en territorio mexicano durante la pandemia.-EFE