Al menos 2.338 menores de edad hondureños no acompañados permanecen retenidos en albergues de Estados Unidos, un 26 % menos que los 3.160 que habían en septiembre, informó este lunes el canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina.
En un mensaje en la red social X (antes Twitter) Reina indicó que el pasado 23 de septiembre, cuando la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, visitó la ciudad fronteriza estadounidense de McAllen, en Texas, «en los centros de detención de migrantes y albergues habían 3.160 menores hondureños no acompañados».
Y al 12 de diciembre, la cifra de menores hondureños en albergues «se redujo a 2.338», lo que significa un 26 % menos a los registrados en septiembre, señaló el canciller.
Agregó que 880 menores hondureños han sido reunificados gracias a un programa de apoyo impulsado por la presidenta hondureña en los consulados de Honduras en Texas. «Seguiremos en esta labor», enfatizó Reina.
Según organismos de derechos humanos, al menos 3.000 hondureños, incluidos menores de edad, abandonan el país cada mes con la idea de llegar a Estados Unidos por la falta de trabajo y en otros casos por la inseguridad que vive Honduras.
Entre enero y el 17 de diciembre fueron deportados 54.279 hondureños, de ellos 14.636 menores, muchos de ellos sin compañía de adultos, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Migración (INM) de Honduras.
Solo las autoridades migratorias de Estados Unidos han retornado a Honduras a 37.537 hondureños, entre ellos 10.383 menores de edad.
Según una encuesta de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), divulgada en junio pasado, el 63,4 % de los menores hondureños que migra de manera irregular a Estados Unidos lo hace por cuenta propia y el 81 % de ellos busca mejores condiciones de vida.
«6 de cada 10 niñas, niños y adolescentes retornados recorrieron la ruta migratoria por cuenta propia, mientras que 3 de cada 10 lo hicieron con un traficante de personas», detalla el documento de la OIM.
El 81 % de los menores busca mejorar sus condiciones de vida, 29,2 % de ellos migra por reunificación familiar y otro 27,8 % por motivos laborales debido a la informalidad y los bajos salarios en su país que no permiten cubrir sus necesidades básicas, según la encuesta.