El cardenal Óscar Andrés Rodríguez señaló en la homilía dominical que en Honduras se olvidó uno de los mandamientos de Dios que es de “no robaras”, en relación con las constantes denuncias durante las compras de emergencia de la pandemia.
“Cómo puede una persona decir que es cristiana si es una persona que roba y roba descaradamente, si se tiene que comprar algunos medicamentos y se hacen las ofertas, muchas veces, se toman las ofertas más caras, porque ya se sabe que se van repartir el dinero, eso es robo”, condenó el cardenal.
El jerarca de la iglesia católica aseveró que las denuncias que se escuchan en los medios de comunicación son robos.
Lamentó que la situación de la sobrevaloración de compras de medicinas ocurre en también en los demás países latinoamericanos generando mucha especulación.
Rodríguez rechazó a los que se dedican a seguir explotando a los pobres, sobre todo en la pandemia.
Los ladrones no entrarán en el reino de Dios, pero se sigue en lo mismo como si no pasara nada, sermoneó.
“No se puede reducir el amor en algo interesado, un ambiente de estímulo solo para ganar y ganar, el poder es una droga, Honduras no puede seguir caminando así”, clamó el cardenal.
Calificó que la satisfacción inmediata del alcohol, droga y el poder es un camino conduce a la cultura de los insatisfechos.
“Cuando la persona no le encuentra sentido a su vida, está perdida y se convierte en una carrera hacia el placer inmediato, todas las necesidades buscan ser satisfechas como una huida hacia adelante”, desglosó.
Puntualizó: “¿De qué le sirve a un hombre ganar el mundo entero si malogra su vida?”.-Proceso.hn