Los líderes indígenas de La Mosquitia expresaron este jueves su enérgica oposición al proyecto de construcción de una megacárcel en la zona de Mocorón, luego de los comentarios de la ministra de Defensa, Rixi Moncada, que confirmó la edificación del centro penitenciario. En respuesta, los dirigentes afirmaron que “tendrán que matarnos” para que se lleve a cabo el proyecto en tierras que consideran propias.
Felicito Reimundo Grecan, uno de los líderes indígenas presentes en la región de Mocorón, recalcó que los pueblos indígenas están protegidos por las leyes internacionales y que los derechos sobre la tierra que habitan están respaldados por instrumentos jurídicos ancestrales. “Nos asiste el derecho a la tierra, y es nuestra obligación defenderla”, afirmó.
Grecan criticó fuertemente las declaraciones de la ministra Moncada, exhortándola a ser más humilde en su postura. “Uno puede opinar por su casa, pero este es un terreno ajeno. Cuatro grupos indígenas son los únicos que tienen la autoridad para decidir sobre estas tierras”, añadió. Los líderes subrayaron que el pueblo indígena no está pidiendo nada al gobierno, sino que está luchando por lo que consideran su derecho legítimo a proteger su territorio.
El dirigente también recordó que en el pasado, los indígenas de la zona cedieron parte de sus tierras para permitir la presencia de militares con el fin de proteger la soberanía nacional, pero no con la intención de que se construyera una cárcel en esa misma área.
“No es posible que el gobierno, que elegimos, quiera venir a explotarnos y robarnos una vez más”, declaró Grecan, quien también mencionó las denuncias de desalojo interpuestas en su contra. «No estamos pidiendo nada, estamos defendiendo nuestras tierras», insistió.
Finalmente, Reimundo Grecan advirtió que si el gobierno insiste en construir la cárcel en ese terreno, tendrán que ser masacrados, ya que “defenderán la tierra con sangre, desde el más pequeño hasta el más anciano”. “Esperamos que la presidenta Xiomara Castro reflexione sobre este asunto”, concluyó.
El conflicto por la construcción de la megacárcel en Mocorón ha generado una creciente tensión entre el gobierno y las comunidades indígenas de La Mosquitia, que mantienen una firme postura de defensa territorial ante lo que consideran una amenaza a su forma de vida y derechos históricos.