El líder opositor Juan Guaidó regresó el lunes a Venezuela tras ignorar una prohibición de salida del convulsionado país sudamericano, y llamó a nuevas movilizaciones el fin de semana para intensificar la campaña por sacar del poder al mandatario socialista Nicolás Maduro.
Reconocido como presidente interino por Estados Unidos y otras 50 naciones, Guaidó arribó poco después del mediodía al aeropuerto internacional Simón Bolívar, donde fue recibido al grito de “¡Sí se puede!” por una multitud y una docena de embajadores y encargados de negocios.
“Sabemos los riesgos a los que nos enfrentamos, eso nunca nos ha detenido”, manifestó Guaidó ante la multitud en la terminal aérea. “Estamos aquí Venezuela, estamos de frente. Debe entender el régimen, debe entender la dictadura… que estamos más fuertes que nunca, seguimos en la calle, seguimos movilizados”.
A la salida del aeropuerto, cientos de personas acompañaron al dirigente que visiblemente emocionado por el caluroso recibimiento salió de una camioneta gris y se montó sobre el techo del vehículo para saludar mientras levantaba con el brazo una bandera venezolana.
El gobierno de Maduro no se pronunció de momento en relación con el regreso del líder del Congreso, que es dominado por la oposición.
Tras su arribo, Guaidó se trasladó de inmediato a la plaza Alfredo Sadel, en el este de Caracas, escoltado por media decena de diplomáticos. Ahí lo esperaban miles de seguidores vestidos con camisetas blancas y portando banderas venezolanas.
“Nos amenazaron y seguimos aquí dándole la cara a Venezuela. Claro que sí se puede y claro que vamos a poder Venezuela”, señaló Guaidó al celebrar su retorno al país, hecho que consideró como un “pequeña victoria”.
“Movilización, unión de todos los sectores, calle”, instó Guaidó, y anunció para el martes reuniones con dirigentes sindicales y una marcha para el sábado. Añadió que su causa cuenta con apoyo internacional. “El mundo nos va a ayudar, pero somos nosotros los que tenemos que avanzar y seguir en esta ruta sin desánimo”, subrayó.
El dirigente hizo un nuevo llamado a la fuerza armada para que se una al movimiento opositor y detengan a los grupos pro-oficialistas armados, conocidos como colectivos, que están reprimiendo protestas antigubernamentales. “¿Qué van a esperar? El momento es ahora”, afirmó el opositor al asegurar que al menos 700 militares activos se han rebelado y han huido hacia Colombia.
“Recibimos con agrado las noticias sobre el personal militar y de servicios de seguridad venezolanos que hacen lo correcto y reconocen al presidente interino Juan Guaidó”, afirmó en un comunicado el secretario de Estado, Mike Pompeo, tras el retorno del dirigente opositor al país.
A su vez, al celebrar el regreso de Guaidó a Caracas, el mandatario colombiano Iván Duque dijo en un mensaje de su cuenta de Twitter que eso forma parte del “irreversible camino” que emprendió Venezuela hacia la democracia.
Embajadores y encargados de negocios de Alemania, Chile, Estados Unidos, Rumania, Francia, España y Portugal, entre otros, acudieron al aeropuerto para recibir y velar por la seguridad de Guaidó, quien comentó que cumplió el trámite de migración sin ningún problema.
“Esperamos que no haya ninguna escalada y que la inmunidad parlamentaria se respete y se respete la constitución venezolana”, dijo a la prensa el embajador de España, Jesús Silva Fernández.
El presidente de la encuestadora local Datanálisis, Luis Vicente León, atribuyó la decisión del gobierno de no detener al Guaidó a la “presión”, especialmente externa, que se dio en defensa del opositor, y dijo en su cuenta de Twitter que esa acción podría indicar el “inicio de una negociación, local e internacional”.
El dirigente opositor retornó tras una gira por algunos países de la región que lo reconocen — incluso Brasil, Ecuador y Paraguay– y después de gestionar la entrada de ayuda humanitaria internacional que el gobierno de Maduro logró bloquear en puntos fronterizos con Colombia y Brasil, en una jornada de mortíferos disturbios, el 23 de febrero.
Las autoridades judiciales tampoco ofrecieron comentarios de momento sobre el caso de Guaidó, a quien el Tribunal Supremo _que controla el gobierno_ le prohibió a finales de enero la salida del país y le congeló sus cuentas bancarias y activos por solicitud de la Fiscalía General que le abrió un proceso judicial por unas protestas de enero.
Estados Unidos y la Unión Europea han advertido que cualquier medida que ponga en riesgo la libertad del dirigente opositor podría desatar una “respuesta fuerte” y una “gran escalda de tensiones”.
El “regreso seguro a Venezuela es de la mayor importancia para Estados Unidos”, dijo el vicepresidente estadounidense Mike Pence en su cuenta de Twitter. “Cualquier amenaza, violencia o intimidación en su contra no será tolerada y se dará una respuesta rápida. El mundo está observando: al presidente interino Guaidó se le debe permitir volver a entrar a Venezuela de manera segura”.
Mientras la oposición buscaba intensificar su presión en las calles, el gobierno se concentró en resaltar en los medios estatales y las redes sociales las celebraciones del carnaval en un aparente intento por desviar la atención de los venezolanos de la crisis.
“Invito a la familia venezolana a disfrutar de los #CarnavalesFelices2019 y de las bellezas naturales”, dijo el lunes Maduro en su cuenta de Twitter en la que difundió un video de un minuto con varios pasajes naturales de Venezuela.-AP