La Policía Nacional de Honduras descartó hoy la hipótesis de un atentado en el incidente en el que fue dañado el vidrio trasero de la patrulla que brinda seguridad a una hija y un nieto de la dirigente ambientalista Berta Cáceres, asesinada en marzo de 2016.
«La Secretaría de Seguridad y (la) Policía Nacional descartan atentado criminal en contra de la familia de Berta Cáceres», indicó el portavoz de la Secretaría de Seguridad, Julián Hernández.