Gilbert Reyes Bermúdez, ciudadano estadounidense y principal sospechoso en el caso de las tres hondureñas asesinadas en Roatán, Islas de la Bahía, fue trasladado nuevamente al Centro Legal de Ciencias Forenses en la capital para someterse a una serie de pruebas científicas solicitadas por su abogado defensor.
Bajo un estricto resguardo policial, el acusado arribó a las instalaciones de Medicina Forense, ubicadas detrás del Hospital Escuela, con las manos esposadas y los pies encadenados, vistiendo una camiseta blanca. Aunque su abogado había informado que las pruebas se realizarían alrededor de las 9:00 de la mañana, Reyes Bermúdez fue trasladado con al menos una hora de anticipación.
Este procedimiento marca la tercera ocasión en que el sospechoso es sometido a pruebas en el Centro Forense. A pesar de que el acusado mantiene su derecho a defenderse a través de estos exámenes, el Ministerio Público lo considera el principal autor de los asesinatos de Dionie Beatriz Solórzano Dixon, María Antonia Cruz Ávila y Nikendra McCoy Francisco.
La comunidad permanece expectante ante el avance de este caso, mientras las autoridades continúan con las investigaciones y las pruebas científicas que podrían arrojar nuevas evidencias sobre la implicación de Reyes Bermúdez en los crímenes.