El padre de los jóvenes, identificados como Elí Jafeth Hernández (18 años) y Gary Brayan Hernández (32 años), explicó que hombres desconocidos irrumpieron en su casa a eso de las 12 de la medianoche.
Al ingresar los obligaron a acostarse boca abajo en el suelo y les pidieron que no los vieran.
«Las puertas me las abrieron a patadas. Las ventanas me las quebraron y cuando me levanto veo que son ellos que están abriendo la puerta y casi me pegan en el pecho. ‘Hijos de pu** tírense al suelo’, nos dijeron”, explicó.
Según contó, los sujetos llegaron fuertemente armados y vestían uniformes de agentes de la Dirección Policial de Investigación (DPI); sin embargo, le causó desconfianza el hecho que anduvieran tenis en lugar de botas.
Tras someterlos, los hombres preguntaron por Brayan y cuando lo vieron aseguraron que «es este», lo levantaron y se lo llevaron.
Justo en ese momento, su hermano levantó la cabeza para ver lo que ocurría y uno de los hombres lo tomó del pelo y le dijo ‘camina vos también hijo de pu**’. Cuando los hombres se fueron, el desesperado padre llamó al 911 para alertar a las autoridades.