Tomado de Proceso Digital
Tegucigalpa – Este día la periodista Marlen Perdomo de Zelaya, directora de Proceso Digital, al recibir el premio de periodismo “Álvaro Contreras” que entrega cada año el Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), llamó a los comunicadores sociales a defender las emancipaciones, entre ellas la libertad de expresión e información, a ser cuidadosos ante las regulaciones en el Internet para evitar tentaciones que quieran limitar su uso, así como a ser rigurosos en la búsqueda de la información, mantener la calidad de las noticias y no olvidar nunca el dato como contexto en las notas periodísticas.
– En la era digital, hay que ser cuidadosos con las regulaciones al Internet, advierte Zelaya.
– “Dedico este momento especialmente a todas las mujeres periodistas que desde sus trincheras ejercen este oficio y dan un cariz más humano a los hechos que ocurren día a día”, pronunció Perdomo.
Perdomo dijo que si bien estamos asistiendo a la revolución digital en el periodismo, éste no debe perder el sentido de la responsabilidad y la calidad de la noticia.
A la entrega del premio, este viernes, se hicieron presentes el presidente de la República, Juan Hernández Alvarado, ministros de la actual administración, connotados periodistas, autoridades religiosas, civiles, policiales y militares, y personajes políticos.
Perdomo de Zelaya comenzó su discurso expresando que el corazón le palpitaba fuerte y que no era su costumbre utilizar la tribuna más que para hablar con estudiantes, como lo hizo en los últimos 15 años en las aulas universitarias, donde centenares de periodistas conocieron de sus enseñanzas. “Las cámaras, los lentes, las grabadoras, las libretas sólo las he usado para preguntar, para recoger testimonios y realidades, para contrastar y descubrir, para trasladar a la audiencia hechos”, pronunció.
Por tres décadas, la premio Álvaro Contreras 2014 ha disfrutado su mayor pasión: ejercer el periodismo. “Vienen a mi memoria las máquinas de escribir, las cuartillas, las trazas de papel… el arribo del Internet con sus modem enormes, conectados a los teléfonos, durante mis años en la Agencia Alemana de Prensa, al lado del colega y amigo Wilfredo García”, agregó.
Llamó a las nuevas generaciones de periodistas hacerle frente a los grandes desafíos, oportunidades y dilemas que deben encarar con valor y determinación.
Proceso Digital, amor eterno
La homenajeada también tuvo espacio en su discurso para hablar de su proyecto cumbre: Proceso Digital, que nació sin apellidos y con puros periodistas. “Desde entonces ya casi llegamos a la década y Proceso (Digital) parece ser de esos amores eternos, entre los lectores y sus periodistas. Todos en el equipo intentamos a cada instante, ofrecer las historias mejor contadas sin que la vorágine multimedia descontextualice la esencia”.
Destacó el esfuerzo de los “héroes anónimos” que siguen siendo casi sólo cifras de deportados, de muertos en el camino, de vejados, de víctimas poco atendidas.
En otro apartado, mencionó que el periodismo ha registrado mutaciones intensas, una realidad dolorosa y hasta involutiva, matizada con avances. “Ese contraste nos hace una especie de Macondo, donde muchas veces la justicia está arriba, más allá del infinito y donde los absurdos parecen ser el pan nuestro de cada día”, manifestó.
Añadió que “bajo esas ópticas siempre tendremos espacios de convergencia y algunos desencuentros, pero lo real es lo real, y sobre esa base es que se debe construir el periodismo”.
Periodismo ante las amenazas del crimen
Marlen Perdomo de Zelaya citó que nuevos actores sociales emergen en el escenario nacional y el periodista debe sumar a la lista de los ya existentes a los que irrumpen con una fuerza brutal y destructora. “El crimen organizado y la corrupción pública y privada, que al final desembocan en la inequidad que mata. Al par, la gente de a pie, con su día a día, pero aún conservando la esperanza… contextualizando su realidad con lo que los periodistas le contamos a través de la radio, la televisión, la prensa de papel y digital. Una gran Responsabilidad”. Apuntó que muchas de las realidades actuales contrastan el encuentro con la revolución digital que también marca el periodismo hondureño, acostumbrado por casi dos siglos al periódico de papel. “Hemos transitado al ritmo de la velocidad mágica con que evolucionan las tecnologías, pese a que la brecha digital sigue siendo un flanco”.
Sin embargo, sugirió que aunque estemos en la era digital, “es necesario no olvidar la profundidad, el dato, la calidad y la rigurosidad”. A la par, recomendó a los periodistas, la academia, los líderes de opinión, los comunicadores ciudadanos, las instancias de sociedad civil, los gobiernos, las empresas y en general “todos los que conformamos los espacios de comunicación debemos asumir el reto y prepararnos con responsabilidad para los cambios”. La destacada periodista hondureña indicó que con las nuevas regulaciones al Internet se debe tener mucho cuidado. “Es importante que las mismas no se conviertan en mecanismos de control de gobiernos o empresas que puedan afectar la libertad de expresión o de prensa. No podemos permitirlo. La libertad de expresión es y debe ser inviolable”, expresó. |
Especial dedicatoria
La comunicadora dedico el premio Álvaro Contreras a su familia: esposo e hijas, así como a colegas periodistas y personas importantes en su vida, pero guardó un especial lugar para las mujeres que ejercen la profesión de informar. “Dedico este momento especialmente a todas las mujeres periodistas que desde sus trincheras ejercen este oficio y dan un cariz más humano a los hechos que ocurren día a día y que tantas veces son desafortunadas y hasta crueles”.
Continuó que “no hay duda que en Honduras las mujeres periodistas llenan grandes necesidades comunicacionales desde una óptica ecuánime, solidaria y de propuesta. También a los jóvenes periodistas y a los estudiantes de la carrera, en cualquiera de las universidades donde hoy enseñan comunicación, les exhorto a mantener presente la esencia del periodismo y comprometerse con Honduras en el ejercicio de la profesión. A defender las libertades”.
“La presencia de la academia en estas luchas, más allá del aula, es impostergable”, dijo.
También tuvo un espacio para recordar a los periodista que ya no forman parte de este mundo porque sus vidas fueron cortadas de forma violenta. “Ellos están presentes en nuestra memoria y sólo el esclarecimiento de los hechos en cada caso será bálsamo para sus familiares y para el gremio”.
Demandó “no más impunidad. Los compromisos para proteger a periodistas son de imperioso cumplimiento. Primero nos corresponde a nosotros mismos, con nuestra rigurosidad y responsabilidad. Fundamentalmente al Estado y a las empresas en que laboramos hay responsabilidades claras que deben enrutarse”.
Perdomo de Zelaya finalizó su discurso: “Anhelamos que el año entrante, cuando de nuevo nos reunamos para recordar la fecha consagrada a los periodistas hondureños, no hayan reportes de ataques a periodistas y a la prensa; y que las libertades de expresión y de prensa estén sólidas y fortalecidas para que tengamos una Honduras caminando hacia la justicia, hacia la prosperidad”.
El Premio Álvaro Contreras es otorgado a escritores, políticos, periodistas nacionales e internacionales. El Premio fue establecido mediante Decreto No. 34 y emitido por el soberano Congreso Nacional de Honduras y es entregado por conmemorarse el 25 de Mayo como el Día del Periodista Hondureño.