Decenas de inmigrantes fueron enviados en buses a Chicago y Nueva York en las últimas horas desde la frontera sur de EEUU en Texas, horas después de que el Tribunal Supremo ordenara mantener la normativa sanitaria conocida como Título 42.
La Alcaldía de la ciudad de El Paso, Texas, que limita con Ciudad Juárez en México, anunció que mantendrá el estado de emergencia, declarado por el alcalde ante lo que se esperaba fuera el fin del regla, que permite la expulsión de la mayoría de inmigrantes que llegan a EEUU por tierra.
«Seguiremos procediendo como si se hubiera levantado» el Título 42, dijo el alcalde Oscar Leeser en una conferencia de prensa el lunes, después de conocerse la decisión del Supremo en Washington D.C.
Las autoridades locales y federales esperaban que la suspensión de la norma, impuesta por el Gobierno de Donald Trump (2017-2021) y mantenida por el actual mandatario, el demócrata Joe Biden, tuviera como consecuencia un aumento en el número de inmigrantes que llegan a las ciudades fronterizas.
Al caer la noche en El Paso, fuera del albergue de la parroquia El Sagrado Corazón, en el suroeste de la ciudad, un hombre y una mujer con camisetas y credenciales de la Oficina de Manejo de Emergencias del estado de Texas comenzaron a ofrecer a los inmigrantes un viaje gratis en bus a Nueva York o Chicago, según pudo comprobar