El nuevo coronavirus superó el sábado la cifra de 150,000 afectados en el mundo, y todos los países, desde a Estados Unidos a España, pasando por Rusia, cierran fronteras y aceleran sus medidas destinadas a atenuar el impacto de la pandemia.
En España, el país europeo junto a Italia donde la pandemia progresa más rápidamente, hubo 1,500 nuevos contagios en las últimas 24 horas, acercándose a los 6,000 afectados y con más de 180 muertos.
El gobierno español, que decretó el estado de alarma, impuso el sábado un confinamiento casi total para todos los ciudadanos, que solo podrán salir por razones laborales o de primera necesidad, como comprar comida.
Además de limitar la circulación de personas, el gobierno ordenó la clausura de todos los comercios y locales de ocio no indispensables, y ratificó la suspensión de las clases ya aplicada en los últimos días.
En Francia, el gobierno también se mandó el cierre de todos los locales públicos «no esenciales», como bares, restaurantes y cines, y se aumentó el nivel de alerta de la epidemia a fase 3. Solo podrán abrir los comercios relacionados con la alimentación, las farmacias, los bancos, los estancos y las gasolineras.
Aún así, se mantuvo la organización de las elecciones municipales, prevista este domingo, si bien se incrementarán las medidas de seguridad e higiene se incrementarán durante las votaciones para prevenir los contagios.
La COVID-19 ya ha matado a más de 5,700 personas en 137 países, según el recuento de la AFP a partir de cifras oficiales, que sitúan los contagiados en 151,767.
Ese recuento, sin embargo, oculta el verdadero impacto de la pandemia a nivel mundial, ya que los métodos de conteo difieren de un país a otro y en naciones como Venezuela, donde se anunciaron los dos primeros casos, puede poner en jaque al devastado sistema sanitario.
En Israel, a partir del domingo, se cerrarán todos los restaurantes, hoteles, centros comerciales, cafeterías y gimnasios y se prohibirán las reuniones de más de diez personas, anunció el primer ministro, Benjamin Netanyahu.
China, país origen de la pandemia, con más de 3,000 muertos, registra en cambio cifras diarias bajísimas de contagio y fallecimientos. El sábado, solo hubo 11 infectados.
En América Latina, Colombia anunció el cierre de los pasos fronterizos con Venezuela y restringió la entrada de extranjeros que hayan estado en Europa y Asia. Venezuela se declaró en «estado de alarma» tras confirmarse los dos primeros casos y Uruguay decretó la emergencia sanitaria y el cierre parcial de fronteras. (AFP)