Analistas económicos han señalado que, al finalizar el año, el dólar americano podría alcanzar una cotización de entre 25.10 y 25.15 lempiras, en línea con la tendencia observada en los últimos meses. Este incremento, que suma alrededor de 11 centavos en lo que va del año, es considerablemente mayor al registrado en el mismo período del año anterior, lo que ha generado preocupación en el ámbito económico.
Los expertos apuntan que la situación se ve influenciada por el mecanismo implementado por el Banco Central de Honduras (BCH) desde abril del año pasado, relacionado con la subasta de divisas. A este factor se suma la presión especulativa ejercida por el mercado negro, lo que ha contribuido a un notable deslizamiento del lempira frente al dólar.
Entre las causas del deterioro de la moneda nacional, los economistas destacan un bajo nivel de inversión y una disminución en el crecimiento de las remesas, que han afectado la oferta. Además, subrayan que Honduras, siendo una economía abierta, depende en gran medida del comercio exterior, lo que se refleja en una balanza comercial donde las importaciones superan a las exportaciones.
La situación plantea retos significativos para la economía hondureña, y se anticipa que los próximos meses serán cruciales para observar cómo evolucionan estas variables en un contexto global incierto.