El protector de derechos humanos consideró que para disminuir los hechos violentos en los centros penales hondureños se deben dividir las maras y pandillas en cárceles distintas.
«Si tenemos dos gallitos de pelea en una jaula, van a pelear y tarde o temprano se van a matar», dijo Maldonado, al mismo tiempo señaló que la medida de separación se la propuso al Secretario de Seguridad, Ramón Sabillón y a la viceministra Julissa Villanueva, esta última encargada del plan de intervención al sistema penitenciario.
La moción exhortativa de Castellanos para retirar «El Pozo», cárcel de Ilama, Santa Bárbara incluye que el edificio sea usado para fines sociales, como una regional del Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop).
El pasado martes la funcionaria presentó diez medidas que componen el plan de intervención en los centros penales de Honduras, entre ellos, el indulto para descongestionar dichos recintos.
Esta figura, que beneficiaría a más de 7 mil reos, es una atribución que la Constitución otorga al presidente de la República para extinguir la o las penas aún no cumplidas, dispuestas mediante sentencia condenatoria firme dictada por un juez.
«El indulto es más política. Tuvo que haber salido del Instituto Nacional Penitenciario (INP) que tiene un ‘machote’ (borrador) sobre un decreto de ‘gracia constitucional'», externó Maldonado, asegurando que los diputados detrás de la aprobación del mecanismo no conocen la problemática de las cárceles.