El cardenal hondureño Óscar Andrés Rodríguez dijo este domingo que en su país se aplica la “pena de muerte” por parte de bandas criminales que a diario le quitan la vida a otras personas.
“Tristemente en nuestra Honduras, claro que no hay ninguna ley que imponga la pena de muerte, pero de hecho hay bandas criminales que practican la pena de muerte y no hay semana que no se diga que asesinan a este, que asesinan al otro, que matan a transportistas, eso no puede seguir así”, enfatizó Rodríguez durante la misa dominical en la catedral de Tegucigalpa.
El religioso también lamentó que mientras en el mundo se ha venido promoviendo la eliminación de la pena de muerte, recién en Estados Unidos una corte retrocede para restablecer esa medida, después de haber estado suspendida desde hace dos décadas.
En el caso de Honduras, señaló que no es un país que vive en la ley de la selva para que alguien mate a otra persona.
“Nadie tiene la autorización para matar y esto hay que hacerlo llegar a todas partes”, recaló Rodríguez, quien considera que los integrantes de bandas criminales por lo general son seres que nunca tuvieron una educación moral, ni quien les enseñara en su niñez que “la vida es sagrada, que no se puede matar a nadie jamás”.
El también arzobispo de Tegucigalpa se refirió además al dengue grave o hemorrágico, que en Honduras ha causado la muerte de al menos 59 personas, en su mayoría menores de edad, en lo que va de 2019, según registros oficiales.
En parte la enfermedad se ha propagado por la suciedad en que viven algunas familias, según Rodríguez, por lo que abogó por vivir en ambientes limpios para evitar que se reproduzca el zancudo transmisor del dengue, el Aedes aegypti.
“Cuándo vamos a entender queridas hermanas y hermanos que necesitamos cambiar la cultura de la suciedad. No podemos vivir en una sociedad de la basura, no podemos vivir en esa cultura de dejar ahí el agua mal almacenada y criando mosquitos y zancudos”, añadió.
El religioso enfatizó que no es con humo que se erradicarán las enfermedades en el país, sino con la cultura de la limpieza, en la que se involucren todos los sectores.
“Nadie puede decir eso a mi no me toca, si todos no nos unimos, no vamos a erradicar la enfermedad”, acotó.
El pasado día 26 las autoridades sanitarias de Honduras confirmaron que 59 personas han muerto a causa del dengue grave entre enero y julio del presente año.
Además, la Secretaría de Salud analiza las causas de otras 91 personas que han muerto con síntomas similares a los que causa la enfermedad.
El zancudo transmisor del dengue se reproduce en depósitos de agua limpia y para contrarrestar la propagación de la enfermedad las autoridades han redoblado las campañas de prevención.
Hasta ahora las autoridades de Salud han registrado unos 34.800 casos de personas que han contraído el dengue en lo que va de 2019, de los que en su mayoría son del tipo clásico o no grave.-EFE