Hasta el 15 de febrero del presente año, los envíos del aromático disminuyeron en un 11 %.
Las exportaciones ascienden a 1.53 millones de sacos de 46 kilogramos, lo que
representa una baja si se compara con los 1.71 millones de sacos registrados en el mismo lapso de 2021-2022.
También hay una disminución en los contratos de venta que en total acumulan 2.45 millones de sacos, lo que significa una rebaja del 16 % en relación con los 2.93 millones de sacos del período 2021-2022.
El precio promedio de exportación por saco a la fecha es de $195.75, mucho menor al registrado en la cosecha anterior que fue de $223.83; es decir, una reducción del 13 %.
Los ingresos por exportaciones disminuyeron en un 22 %. Se han enviado cargas por el valor de $300 millones, una cifra inferior a los $384 millones que se
mandaron en el primer trimestre de la temporada 2021-2022.
Esta situación desmotiva a muchos productores. Incluso, algunos del sur de Copán y de la zona norte han tenido que reducir los lotes de cultivo, porque dicen que ahora no es ganancia tener café.