En Nigeria, al menos 160 personas murieron y más de 300 resultaron heridas tras una serie de ataques perpetrados por grupos armados en varias localidades. Los hechos ocurrieron en el estado de Plateau, una región donde los enfrentamientos son frecuentes debido a la gran diversidad étnica y religiosa. Ante esta situación, miles de ciudadanos se han visto obligados a abandonar sus hogares. Según las autoridades, los ataques, que tuvieron lugar el pasado fin de semana, estuvieron bien coordinados.