Luego de meses cerradas, las salas de cine podrán regresar a operar únicamente con el 20% de su aforo, y manteniendo las distancias entre espectadores.
Además, deberán contar con la respectiva señalización y rótulos que permitan a la población respetar la distancia recomendada, así como exigir el uso obligatorio de mascarillas y gel de manos que estará habilitado de forma gratuita en todo el establecimiento.
Personal capacitado
Parte importante para mantener el control en el recinto será la capacitación del personal taquilla, boletería, servicio de alimentos así como los de la cocina, quienes aparte de usar mascarilla diferente cada cuatro horas, portaran guantes y el equipamiento adecuado para evitar contraer el mal viral.
Se colocarán estaciones de desinfección para clientes a lo largo del establecimiento, asimismo, para los colaboradores a su ingreso y su área específica de trabajo
También habrá contenedores de desechos sanitarios y se instalarán acrílicos para separar a los clientes y colaboradores en las cajas.
Experiencia
Para no afectar la experiencia del espectador y respetar su seguridad al mismo tiempo, se tendrá una separación de una butaca entre cada persona, además las salas tendrán una fila deshabilitada.