El presidente de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (CHICO), Silvio Larios, expresó su preocupación ante la creciente deuda del gobierno con las empresas constructoras, mientras continúa inaugurando obras públicas de manera constante.
Según Larios, aunque el gobierno presume cada semana nuevos proyectos finalizados, las empresas responsables de su ejecución no han recibido los pagos correspondientes, lo que está generando una seria crisis en el sector. El dirigente calificó esta situación como una “actitud irracional y preocupante” por parte de las autoridades, quienes aseguran contar con una alta recaudación tributaria, pero no cumplen con sus compromisos financieros.
“Se anuncian e inauguran obras ante los medios, pero no se les paga a los contratistas. Es un mensaje equivocado para el país, estamos haciendo las cosas al revés”, lamentó Larios.
El titular de CHICO señaló que en muchos casos, las constructoras no reciben anticipos ni desembolsos, debido a que la Secretaría de Finanzas no libera los fondos a tiempo. Actualmente, la deuda acumulada con el sector asciende a más de 4 mil millones de lempiras, involucrando a entidades como la Secretaría de Infraestructura (SIT), el Fondo Hondureño de Inversión Social (FHIS), gobiernos locales y otras instituciones estatales.
En relación con el programa de construcción de viviendas impulsado por el Banco Hondureño para la Producción y la Vivienda (BANHPROVI), Larios indicó que inició con buenos resultados, pero luego se limitaron los recursos, lo que ha frenado significativamente los avances. Detalló que en el primer año del actual gobierno se construyeron 30 mil viviendas, luego 10 mil y en el tercer año solo 7 mil. Para 2025, no hay fondos asignados para continuar el proyecto.
“Esto está creando una tormenta perfecta en el sector. La población necesita paz, empleo y certidumbre, pero lo que tenemos es incertidumbre y un modelo que se está paralizando”, advirtió.
Larios concluyó haciendo un llamado al gobierno para que cumpla con las leyes y honre sus compromisos financieros con el sector privado, señalando que esto es clave para mantener la estabilidad económica y la generación de empleo en el país.