Honduras ha llevado a cabo la extradición diferida de José Rafael Sosa Méndez, un ciudadano hondureño solicitado por el gobierno de Estados Unidos por su presunta vinculación con delitos relacionados al narcotráfico. Bajo estrictas medidas de seguridad, el acusado fue trasladado por fuerzas del orden hasta la base aérea Soto Cano, ubicada en Palmerola, Comayagua, donde fue entregado a agentes de la DEA, quienes lo trasladarán a territorio estadounidense para enfrentar cargos ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
El proceso de extradición de Sosa Méndez había sido solicitado desde 2020 por las autoridades estadounidenses, tras ser señalado en delitos vinculados al narcotráfico. Su detención inicial ocurrió en marzo de 2017, cuando fue arrestado junto a otras personas por delitos de portación ilegal de armas, asociación ilícita y su posible vínculo con la muerte del futbolista hondureño Arnold Peralta.
La Corte Suprema de Justicia de Honduras concedió la extradición, pero de forma diferida, ya que Sosa Méndez debía cumplir primero una condena en un Tribunal de Sentencia del país. A pesar de su condena en Honduras, Sosa Méndez fue objeto de controversias debido a las presiones recibidas para trasladarlo a centros penitenciarios de mínima seguridad, algo que fue denunciado por el jefe del sistema penitenciario, coronel Ramiro Muñoz.
Con su traslado definitivo a Estados Unidos, se cierra un capítulo en un proceso legal que ha estado marcado por múltiples controversias y presiones judiciales. Ahora, el extraditable enfrentará la justicia estadounidense por los cargos de narcotráfico que se le imputan.