Las cifras de violencia contra las mujeres en Honduras continúan en ascenso, lo que refleja una alarmante crisis de seguridad y justicia para las mujeres en el país. Hasta el 26 de febrero, las organizaciones feministas han reportado al menos 41 femicidios, lo que resalta el grave deterioro de la situación, según lo informado por Visitación Padilla, miembro de la organización feminista que lleva su nombre.
Padilla, junto con otros activistas, advirtió sobre la falta de una respuesta efectiva por parte de las autoridades, señalando que el sistema de justicia no está cumpliendo con su obligación de proteger la vida de las mujeres. “Las estadísticas son alarmantes. Las mujeres siguen muriendo y el sistema judicial no está haciendo lo suficiente para protegerlas”, manifestó.
Ante esta preocupante situación, Visitación Padilla señaló que existen diversas propuestas para abordar el problema, entre ellas, la creación de un observatorio conjunto con el Poder Judicial. Este mecanismo permitiría recopilar y actualizar los datos estadísticos relacionados con los femicidios, lo que ayudaría a mejorar las bases de información que, según los activistas, actualmente se encuentran obsoletas.
Además de la recopilación de datos, Padilla subrayó la necesidad urgente de modificar las leyes existentes, especialmente el Código Penal, para imponer penas más severas a los homicidas de mujeres. La activista destacó que las reformas legislativas son esenciales, ya que las normativas actuales no han logrado los resultados esperados en la lucha contra la violencia de género.
A la cifra ya alarmante de femicidios reportados por las organizaciones feministas, se sumó este jueves un nuevo caso: el asesinato de una mujer en el municipio de Guaimaca, en Francisco Morazán, lo que aumenta aún más la preocupación en torno a la creciente violencia de género en el país.
Las organizaciones feministas también han alertado sobre el alto nivel de impunidad que persiste en Honduras, señalando que los crímenes contra mujeres no solo continúan, sino que se cometen con mayor brutalidad. Esto refleja una desprotección generalizada en la que viven las mujeres en el país, donde las medidas de seguridad y justicia no han logrado erradicar la violencia machista.
Con la continua escalada de violencia, activistas y organizaciones de derechos humanos hacen un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas más eficaces y garanticen la seguridad y protección de las mujeres en Honduras.