El precandidato presidencial del Partido Liberal, Jorge Cálix, ha solicitado la renuncia de la familia presidencial después de la difusión de un video comprometedora en el que Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Xiomara Castro, aparece en una reunión con narcotraficantes. En la grabación, Zelaya discute la entrega de varios millones de lempiras para financiar la campaña electoral de Libre en noviembre de 2013.
Vestido con una camiseta blanca que llevaba la leyenda: “La mitad es para el comandante…”, en referencia a las declaraciones de Zelaya a Devis Leonel Rivera Maradiaga sobre una entrega de 650 mil dólares, Cálix leyó un pronunciamiento de su corriente interna que aborda los recientes acontecimientos con un fuerte matiz de narcoescándalo.
Cálix criticó al gobierno por su intento de desviar la atención del escándalo mediante teorías conspirativas. “El discurso alarmista sobre un supuesto plan para destruir el gobierno parece un intento desesperado por desviar la atención del grave escándalo que involucra a su cuñado, Carlos Zelaya”, afirmó.
El precandidato consideró que el video revela una profunda corrupción dentro del círculo cercano de la presidenta Castro. “Es inaceptable que Castro intente minimizar el escándalo como lo hizo en cadena nacional. La evidencia del vínculo de su cuñado con narcotraficantes es irrefutable. El video expone las verdaderas razones detrás del intento de la familia Zelaya de controlar el Congreso Nacional”, agregó.
Cálix exigió que, en nombre de la decencia que la familia Zelaya-Castro pregona, todos los miembros implicados asuman su responsabilidad política. “La presidenta Xiomara Castro; su esposo, el comandante Manuel Zelaya; su hijo, el secretario privado Héctor Manuel Zelaya; y su hija, la diputada Xiomara Zelaya Castro, deben presentar su renuncia inmediata. También deben dimitir el jefe de la Fuerza Aérea, el general de Brigada Guillermo Augusto Rosales Rubio; y el jefe de la Guardia de Honor Presidencial, el general de Brigada César Rosales Rubio”, declaró Cálix.
El precandidato liberal calificó como una “distracción” las recientes denuncias de la presidenta sobre un complot contra su gobierno y subrayó que “la verdadera amenaza a nuestra democracia es la corrupción y el narcotráfico en el actual gobierno de los Zelaya”. Según Cálix, la renuncia de Castro y su entorno es no solo una exigencia moral, sino una necesidad urgente para restaurar la gobernabilidad y la paz en Honduras.