El canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, dijo este jueves que su país denunció el tratado de extradición con Estados Unidos porque temen que el mecanismo sea utilizado como un “arma política” contra funcionarios del gobierno.
“El gobierno de la presidenta Xiomara Castro también teme que Estados Unidos utilice el tratado (de extradición) como una arma política que perjudique los intereses del gobierno y del partido en gobierno”, subrayó Reina.
El Gobierno hondureño notificó el miércoles a la Embajada de Estados Unidos en Tegucigalpa la decisión de “dar por terminado” el tratado de extradición entre los dos países, horas después de que la Embajadora estadounidense, Laura Dogu, expresara la preocupación de su país por la reunión de autoridades de Defensa de Honduras con el sancionado ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López.
Dogu dijo el miércoles a periodistas que fue “sorprendente y un poco decepcionante ver oficiales del Gobierno (hondureño) sentados con miembros de un cartel basado en Venezuela”, cuando la presidenta hondureña, Xiomara Castro, “está en una lucha constante contra los narcotraficantes”.
El canciller hondureño señaló que dar por terminado el tratado de extradición con Estados Unidos es “una atribución del Poder Ejecutivo” y que con ello se está “cumpliendo los procesos legales nuestros y el procedimiento internacional”.
En declaraciones al Canal 5 de Tegucigalpa, Reina dijo que el Gobierno hondureño teme que Estados Unidos solicite en extradición a algún alto funcionario o militar de Honduras “basado en temas puramente políticos”.
El canciller hondureño denunció además que, según informes de inteligencia militar, hay una “conspiración” para dar un golpe militar contra el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras, general Rooselvet Hernández.
“Las informaciones de inteligencia que se tienen en las Fuerzas Armadas indican que se está promoviendo un golpe de barracas basado en esta declaración de la Embajadora (de EE.UU.), porque acusa prácticamente al general Roosevelt de estar inmiscuido en narcotráfico con una persona de otro país y al ministro de Defensa (José Manuel Zelaya), entonces es muy grave”, subrayó Reina.
Enfatizó que la presidenta Castro “está clara (de que) no se va a permitir que se dividan las Fuerzas Armadas, que se busque conspirar en las Fuerzas Armadas, porque son precisamente los garantes de la democracia en este país en un proceso electoral por las facultades que les da la Constitución”.
El canciller indicó que algunos militares de Honduras “estaban ya conspirando, con la idea de que como se está acusando al general Roosevelt hay que quitarlo de ahí”.
Unos 50 hondureños solicitados en extradición, principalmente por Estados Unidos, en su mayoría por narcotráfico, han sido extraditados entre 2014 y 2024, según cifras oficiales.
Entre ellos el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández (2014-2022), que el pasado junio fue condenado a 45 años de cárcel y cinco más de libertad vigilada por un tribunal de Nueva York por varios delitos relacionados con el narcotráfico y el uso de armas.-EFE