La Oficina del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA) ha recibido hoy el informe del Departamento de Cooperación y Observación Electoral (DECO) sobre el proceso electoral presidencial en Venezuela para 2024. El informe, adjunto al comunicado, destaca severas irregularidades y deficiencias en el proceso.
Según el DECO, el régimen venezolano ha implementado un esquema represivo y manipulador que ha distorsionado el resultado electoral, dejándolo vulnerable a la manipulación. El informe denuncia la ausencia de garantías y transparencia, fundamentales para un proceso electoral justo. La falta de auditorías y la acumulación de promesas incumplidas desde 2013, como la auditoría del 100% de las actas del proceso electoral del 14 de abril de 2013, subrayan la crisis de confianza en el sistema.
El informe critica la gestión del régimen de Nicolás Maduro por burlarse de la comunidad internacional y llevar a cabo elecciones sin garantías. Destaca que, mientras el comando opositor ha presentado actas que muestran su victoria, el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el régimen aún no han presentado pruebas concluyentes de su propio resultado. La OEA exige que se acepte la derrota del actual régimen y se facilite el retorno a la democracia en Venezuela. De no ser así, se plantea la necesidad de nuevas elecciones con la supervisión de la Unión Europea y la OEA, y un nuevo CNE para reducir la irregularidad institucional.
El Secretario General de la OEA, Luis Almagro, condenó la situación actual, recordando que ninguna revolución debe dejar a su pueblo con menos derechos y más desigualdades. También lamentó la falta de memoria de la comunidad internacional, que lleva a repetir errores y obliga a la OEA a reiterar sus pronunciamientos sobre la crisis en Venezuela.