El rescate del Lago de Yojoa fue la excusa perfecta utilizada por el gobierno de Xiomara Castro para saquear 720 millones de lempiras de las arcas del Estado.
Con el supuesto objetivo de frenar y regular las actividades que provocaban la contaminación en la cuenca, Xiomara anunció a finales del año 2022 el plan de rescate del Lago de Yojoa y sus alrededores que abarcaba unas 130,000 hectáreas.
El plan establecía trabajos integrales de varias instituciones. Entre las acciones estaba la supervisión en la cuenca por parte de instituciones como la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), el Instituto de Conservación Forestal (ICF), la Fiscalía Especial del Medio Ambiente (Fema), el Ministerio Público, Fuerzas Armadas (FFAA) para verificar los licenciamientos de las actividades que se estaban haciendo en la zona.
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Autoridades gubernamentales afirmaron que, para la exitosa ejecución del proyecto, se destinarían 720 millones de lempiras.
De manera insólita, un año después del anuncio del plan, el lago sigue igual de sucio y contaminado, mientras que de los millones no se sabe absolutamente nada.
Agravando aún más la situación, los dueños de restaurantes que fueron obligados a desmontar sus mejoras hoy están al borde de la quiebra y enfrentan procesos judiciales impulsados por el régimen Castrista Zelayista, que los acusa de contaminar el lago.