El Clúster de Protección revela las necesidades humanitarias que desde mediados de marzo de este año a la fecha, tiene los migrantes que transitan por Honduras que son entre 10,000 y 15,000 personas a la semana, por la frontera de Agua Caliente.
«Ellos bajan en el punto de control migratorio y policial instalado en el sector denominado Machuca», señala el informe.
Ese es un punto que está aproximadamente a 2 kilómetros de la frontera oficial con Guatemala, ubicada en el municipio de Santa Fe, Ocotepeque.
Pero al llegar a este lugar, las principales necesidades humanitarias se concentran en agua saneamiento e higiene.
«Solo hay cinco baños en funcionamiento y no se logra cubrir la demanda y a los migrantes les toca pagar por el servicio sanitario o hacer sus necesidades fisiológicas en público o a escondidos en el monte», explican.
Además identifican que es necesario dotarlos de zapatos y ropa, que son las necesidades más urgentes que presentan.