De los más de ocho mil detenidos que deja el estado de excepción en Honduras, que inició el 6 de diciembre de 2002, apenas 86 casos llegaron a los Juzgados en Materia de Extorsión, revela la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), en su informe «Extorsión bajo la lupa».
«El mes de mayor ingreso de casos fue enero 2023, con 20 casos, mientras en diciembre 2022 y marzo de este año, solo ingresaron 14 casos», dice el informe.
Como siempre la mayor concentración de casos se da en San Pedro Sula con 51
casos y Tegucigalpa con 35.
«La Policía Nacional está trabajando, incluso ha perdido policías en el ejercicio de sus funciones. El problema es que los hondureños queremos ver resultados que se han dado como en El Salvador, queremos acción, pero son escenarios diferentes», explica Gonzalo Sánchez, analista en seguridad.
En el país para un verdadero combate a la extorsión asegura que hace falta que se forme un frente común y no dejar sola a la Dirección Policial Anti Maras, Pandillas y Crimen Organizado (Dipampco).
«Se debe formar un frente común entre el Congreso Nacional, la Corte Suprema de Justicia (CSJ), las Fuerzas Armadas (FF. AA.) y la Policía para combatir a las maras y pandillas. Solo la Dipampco no puede contra ese delito», dice Sánchez.